El Pibí boreal


Olive-sided Flycatcher I, originalmente cargada por Aztlek.

El martes pasado estuve en el Humedal de Itzatá, también conocido como el Humedal de Córdoba. Claro haciendo fotografía de aves, que hace rato no hacía. Y al principio estaba un poco aburrido pues no había podido hacer ninguna fotografía. No veía ningún ave y sin embargo a mi alrededor podía escucharlas muy cerca y gran número. Era como si estuvieran diciendo.

— Haja jaja. !No puedes vernos¡, !no puedes vernos¡, !nosotros si te vemos y tu no! — perecía que cantaban en un tono muy burlón.

De vez en cuando pasaban raudamente volando casi al frente mio y se perdían en el follaje.

— Ja ja ja — cantaban todavía mas duro y en tomo más burlón.

Ya creía que me iba a tocar regresar sin ninguna foto, o peor, sin conocer una nueva ave.

Cuando llegué a un claro en el bosque del humedal. Este humedal tiene un bosque alrededor del agua que es relativamente tupido y tiene pocos claros, por lo que hacer fotografía en él es complejo. Pero les decía que llegué a un claro y apenas entré noté mucha actividad en el dosel. Unos pajaritos que se verían grises volaban de un lado al otro con fuertes reclamos. Me habían visto.

— ¡Humano, humano! ¡Cuidado! — repetían incesantemente.

Y a la mayoría dejé de verlos  rápidamente. Sin embargo, uno lanzaba su llamado desde una rama seca muy alto y voló rápidamente. Al principio me pareció un copetón. Como buen bogotano y citadino todas las aves se me parecen a las pocas que conozco. Y es que en el sitio donde antes vivía había muchos copetones y anidaban en los árboles del frente de mi casa. Y cantaban todas la mañanas y me despertaban en la mañana después de una noche de insomnio. Y de alguna forma, les tomé cariño.

El color parecía más bien un gris que se camuflaba muy bien. Volvió a la misma rama y rápidamente dirigí el teleobjetivo a él. Y no, no era un copetón. Un pájaro que no conocía. Un Pibí boreal.

Esta es un pájaro que migra desde norteamérica. Tan sólo dieciocho centímetros de pájaro y es capaz de volar desde los bosques de coníferas de Canada y EE. UU. para venir a veranear. Se reproduce en esos bosques y aquí viene de vacaciones.

Realmente es gris, dicen los expertos,  un gris oliva en los lados, la cabeza y las partes superiores. En el pecho pareciera tener un chaleco. Y lo que no dicen los expertos es que el copete es de un gris más oscuro. Ese fue el causante de que lo confundiera con un copetón.

En la primera foto de este artículo se puede ver bien el copete, y los colores pero, en ninguna se puede ver el famoso chaleco. Y es que con las posición del sol en ese momento el pecho se le veía de un blanco refulgente, lo que también llama mucho la atención.

Olive-sided Flycatcher II, originalmente cargada por Aztlek.

El Pibí es un atrapamoscas, se para en una rama seca esperando a su presa, acechándola y apenas se acerca el Pibí vuela rápidamente y ya no hay más insecto. Lo hace tan rápido que al principio yo no comprendía que era lo que estaba haciendo. Creí que era una técnica para engañarme y no dejarse hacer fotos. Pero no, realmente a el no importaba mi presencia.

Y eso que este tipo de Pibí son muy territoriales, defienden a capa y espada su espacio, o mejor con pico y garras.

Según la Guía de Campo de las Aves de Colombia de la Fundación ProAves, esta es un ave que es poco común de ver en Colombia, lo cual me pone muy contento de haberla conocido

Pero hay malas noticias. Se considera que el Pibí boreal está casi amenazado, inclusive en la Guía de campo de las aves dice que es vulnerable, un nivel más. Pero sea de uno o de otro nivel, lo cierto es que esto pasa por destrucción del su hábitat. Pero lo triste es que es el hábitat a donde migra, no en América del norte, sino aquí en el sur. Seguimos con nuestra afición de destruir ecosistemas y acabar con especies.

Mapa conceptual

A modo de resumen del Pibí boreal te dejo el siguiente mapa conceptual.

Mapa conceptual del "Contopus cooperi"

Mapa conceptual del «Contopus cooperi»

Referencias